Mi mente funciona como una espiral y siempre vuelve a los  mismos temas pero con distinta visión. En estos trabajos el  mar es la idea, busco encontrar el sitio y el instante donde  acaba fundiéndose con el cielo y en las zonas de las  marismas hay tanto delante y detrás que no existe el  principio ni el fin y el mar se pierde con los pequeños y  vulnerables trocitos de tierra, las marismas son un hábitat descordinado que el hombre ha aprendido a habitar, es un conjunto, una alineación de acontecimientos donde la marea ya no es tierra y todavía no es mar.

El mar es el sueño de cualquier cielo, un interminable espejo de agua, un binomio con el que me gusta jugar, geométricamente se puede ver desde arriba y desde abajo por la composición, por los colores y por el juego de espejos, son mundos paralelos donde trabajo con los limites del mar y del cielo. Trabajo con una técnica mixta con pigmentos y collage y uso la tela de soporte como un material mas sacando hilos o interviniéndola, integrandola con el paisaje. También utilizo la madera como soporte porque resiste bien el collage con distintos materiales y las texturas mas gruesas. Con este proyecto me gustaría acercar al espectador a todo aquello conocido pero difícilmente explicable, utilizando la geometría y el color con sus aspectos a la vez abstractos y concretos.